
Desde dulces como bayas, gofres y sidras, hasta embutidos y algunos de los mejores quesos del mundo. Y no te olvides del marisco fresco: el cangrejo real, el salmón y el famoso bacalao del Atlántico, o el cordero que es especialmente tierno y jugoso, debido a que la mayoría de los animales pastan en los pastos de la periferia. Y cuando su estómago esté lleno, puede disfrutar de museos galardonados y obras maestras arquitectónicas, festivales de música enérgicos. O puede aprender más sobre la cultura sami o vikinga, que es una gran parte de nuestra historia. ¡Noruega es más que una naturaleza deslumbrante!